miércoles, octubre 25, 2006

EL CREPÚSCULO DE UNA ENÓLOGA


Antes que cayera el sol, terminaría su copa.

MIC

Ahora estoy escuchando música electrónica. Me gusta agiornarme. No quiero ser uno de esos viejos que dicen: "...y a eso le llaman música; en mis tiempos era de verdad, había melodía..."

GLOBOS


Hacía tiempo que no prendíamos un petardo con mis primos. Pero todavía nuestros sobrinos eran muy chiquitos. Sólo podríamos jugar con globos. Tuve suerte de tomar el nacimiento de dos de los nuestros y ser testigo casual de la vida y muerte del tercero que dejó su huella en el cielo. Año nuevo alegórico.

Chainis


Iba de una punta a la otra de la ciudad. De pronto me doy cuenta que en dos paradas, el subte, se llenó de chinos. Con mi agudeza deduje: pasabamos por China Town. Así de repente como se llenó, no quedó casi ninguno. Él fue el último que se bajó del bagón c.onmigo

martes, octubre 24, 2006

UNA FLOR

Me gustan las flores. Me gustan los colores.

CARILÓ

Tomo sol y me muero por refrescar mi piel. Pero siempre llego hasta la arena húmeda y ya tengo frío. No me baño en el mar. Me tengo que divertir de otra forma. Apilando sillas.

BEATLE

Alquilamos uno convertible justo ese día. El beatle ya tiene forma de bañera. Esa noche, después del baño de inmersión, dormimos genial. Mirá esas nubes... llenas de agua.

Como pez en el agua



No me gusta estar frente al objetivo. Por eso cada vez que me enfocan. Me escudo con mi cámara y disparo antes.

RECUERDOS














Mamá me decía que no ensucie el piso con las ruedas llenas de barro. La levantaba hasta el patio. En los departamentos de Buenos Aires no hay tanto espacio como para un patio.

SAN ROQUE


En la curva 53 ó 54, antes del dique, nos paramos. No había nadie. Hacía frío. Sólo salimos el tiempo suficinte para tomar esta foto. Claro, volvimos al auto para calentarnos. Estabamos en villa cariño.

REMERO


De allí en más eran todas islas. Le sobraba energía. Había hachado madera toda la mañana para pasar el invierno en la isla. Ahí vive. La acomodó para que no la mojara ni las lluvias ni las nevadas. Pero le sobraba energía. Se remó toda la costa, solo por un paseo. Ama su isla. Su lugar en el mundo.

SERIE TORMENTOSA